Siempre, insisto, entre mis consejos, que si decides que la música debe sonar, que suene, no te quedes a medias tintas.
Si haces una ráfaga musical (subes a primer plano la música que está sonando en plano fondo) que suene, nada de timidez. Y súbela en el momento justo:
(Imagina que las olas negras son la representación de tu voz, y la línea azul la música, la llevas debajo y decides subirla. Pues sube, cuando acabas, NO, un rato después. Y lo mismo al bajar, baja cuando hablas, NO ANTES.Y si la subes, la subes).
¡Ojo! que si buscas crear un efecto, puedes hacerlo como quieras.